La persona que fue detenida, llevada ante el juez y encarcelada por
tal delito se llama Miguel Ángel Panadero Sandoval, y como ha recogido
recientemente el diario El Mundo, actualmente trabaja como procurador en
los tribunales de Valencia.
Miquel Grau |
Su muerte por parte de un militante de Fuerza Nueva le convirtió en
símbolo de la lucha por la autonomía y la izquierda en plena
Transición. La persona que fue detenida, llevada ante el juez y
encarcelada por tal delito se llama Miguel Ángel Panadero Sandoval, y
como ha recogido recientemente el diario El Mundo, actualmente trabaja
como procurador en los tribunales de Valencia.
Como ha podido comprobar este diario, actualmente responde
profesionalmente al nombre de Miguel Ángel-Díaz Panadero Sandoval, y su
despacho está en la ciudad de Valencia.
Según el semanario El Temps, Panadero Sandoval forma parte de una
familia bien posicionada que hizo fortuna con las concesiones de la
administración franquista en el negocio de las gasolineras.
El joven Miquel Grau, de 20 años y militante del Movimiento
Comunista del País Valencià, se encontraba el día de la agresión
colocando carteles, llamando a la manifestación reivindicativa cuando
empezaron a lanzarles agua y una maceta. Si bien no le dieron
importancia, finalmente un gran ladrillo impactó en la cabeza de Grau,
causándole graves heridas que dejaron en coma. Diez días después
falleció y la jornada siguiente en la ciudad de Alicante se celebró su
funeral, al que asistieron miles de personas que llenaron las calles.
El 11 de octubre ingresaba en la cárcel de Alicante tras entregarse
y casi un año después Migue Ángel Panadero Sandoval era condenado a
doce años y un día de reclusión menor como autor de un delito consumado
de homicidio. El ahora procurador en Valencia también tuvo que realizar
una indemnización a los familiares de Grau de un millón y medio de
pesetas y otro medio millón por el coste de la estancia y operaciones
del fallecido durante su atención sanitaria. En 1979 el Tribunal Supremo
confirmaría la decisión de la Audiencia Provincial de Alicante después
de desestimar un recurso del acusado.
Indulto del Gobierno de Suárez
No obstante en 1982 salía de la prisión. El Boletín Oficial de
Estado recoge el Real Decreto por el que en mayo de 1979 el Ministro de
Justicia del gobierno de Adolfo Suárez, Íñigo Cavero, concedía el
indulto parcial a Miguel Ángel Panadero "conmutando la pena privativa de
libertad por la de seis años y un día en prisión mayor". Según
informaciones referidas al condenado, su corto paso por la cárcel fue
producto de varias ventajas penitenciarias de la época.
Como explica el diario de ámbito estatal antes señalado, durante su
estancia carcelaria estudió Derecho. Su prima se casó con José
Fernández Cerrá, uno de los tres asesinos de los abogados de Atocha, hoy
propietario de dos empresas en la provincia de Alicante.
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